viernes, 29 de abril de 2011

Expo TNT

El día de hoy en el centro de convenciones de Tlatelolco dio inicio la 21° Expo TNT. La Expo TNT es una convención dedicada al comic, anime y manga japonés, pero sobre todo a estos dos últimos. Este año el evento cumple 10 años, en el se dan cita comerciantes que venden artículos de series de anime y manga, comida japonesa, dulces,  discos, conferencias y conciertos con artistas japoneses.

A exposiciones  como la TNT asisten personas amantes del anime y el manga, a quienes les suelen llamar otaku (es una palabra japonesa usada para denominar a las personas que se quedan en casa), los otakus suelen llevar su fanatismo a tal extremo que llegan a hacer cosplay. El cosplay es el disfraz que elaboran hombres o mujeres emulando a su personaje de anime o manga favorito, aunque últimamente también  hacen cosplay de series de televisisón y películas.

Algo que me encanta de ir a estos lugares es ver a la gente disfrazada, pues muchos de los trajes son hechos con una dedicación y creatividad sorprendentes. Los contras que tienen las convenciones son los precios caros de los artículos que se venden. Como parte del programa de actividades, los organizadores suelen traer desde Japón a cantantes e intérpretes que amenizan el evento unos 45 minutos aproximadamente. He de confesar que suelo ir a estas convenciones, como se puede notar me gusta mucho el manga y el anime.

Lo que más amo es comprar la comida japonesa, desde el sushi hasta el takoyaki (bolitas de calamar o pulpo), panes al vapor, etc.; un sin fin de comida. Otro cosa que alegra a mi paladar es comprar dulces japoneses, hay unas galletas llamadas Pokys deliciosas, son unos palitos cubiertos de chocolate, hay otras galletas que se llaman koalitas, en los stands te venden la premisa "si compras una caja  estas ayudando a los koalas en Australia"; lo cual por supuesto nunca he creído. Estoy consciente del consumismo exacerbado que representan estos sitios, pero son muy divertidos.

domingo, 24 de abril de 2011

Cuando los animales atacan...jajajajaja...

Hoy domingo 24 de abril en el  parque-zoológico los Coyotes nos llevamos semejante susto. Llegué al parque a eso de las 11 horas (hrs), me asignaron estar a cargo del taller de máscara de teporingo, durante las dos hrs que duró el taller, atendí aproximadamente a 35 a niños, de los cuales 25 me decían señora al pedirme el material para dibujar, con el primer niño me enojé; pero no le dije nada, claro que pensé “dónde me vio la hilera de hijos este chamaco”, en fin solo procedí a contestarle al chico “aquí tienes amigo , en la mesa hay colores”, enseguida los siguientes 24 niños no cambiaban el sufijo señora; al 3° niño dejé de inmutarme y comprendí que no valía la pena enojarme, son niños, “pequeñas criaturas fascinantes”...jajajajaja.

El susto vino a eso de las 14:00 hrs cuando nos disponíamos a comer mis compañeros de trabajo y yo nuestro lunch, cuando por radio nos avisaron de un código rojo (cuando un animal se escapa), del albergue de los mapaches los 4 ejemplares habían escapado debido a que un médico dejó la puerta abierta; el pánico se apoderó de las personas que estaban en el área de los pequeños mamíferos, ya que los mapaches estaban agresivos, nos pidieron nuestro apoyo a los voluntarios, rápidamente nos trasladamos al centro del parque; nos tocó evacuar  a la gente. Después de esa acción  entramos junto con los médicos y guarda-animales al albergue, los mapaches se habían atrincherado en el hospital y gruñían además de aventar zarpazos.  La histeria de la gente fue tal que una señora propagó la mala información de que los pumas eran quienes se habían escapado, finalmente, los médicos lograron calmar a los mapaches, este día fue divertido.

viernes, 22 de abril de 2011

Arqueología

El lunes 18 tuve la oportunidad de estar en los laboratorios del Museo de Antropología e Historia fue una gran experiencia. Tengo un amigo llamado Esteban que estudia arqueología en la Escuela Nacional de Antropología e Historia, esta en su último semestre y trabaja con uno de sus maestros en el área de restauración del museo. Por la mañana llegué a eso de las  10 a una de las entradas de atrás del museo, los lunes los museos de INAH se mantinen cerrados, mi amigo me había invitado conocer su trabajo, ya que sabe lo mucho que me gusta la arqueología.

Entramos al salón de restauración 14, Esteban me mostró una colección de cerámicas de la región de Cholula que estaban restaurando, les daban mantenimiento ya que me explicó que cada cierto tiempo a las piezas que estan en exhibición se les debe barnizar con una resina sintética para conservar los colores originales y deben de estar a una temperatura no mayor a 15°C. Luego procedió a enseñarme otro laboratorio donde estudian los restos humanos, la verdad  sólo aguante unos minutos en aquel lugar, ya que se me hizo muy tétrico ver huesos humanos, en una parte tenían  los craneos, en otras cajas femures y así separaban los distintos huesos, cada  uno estaba marcado con una serie de 6 números; mi amigo me dijo que los dos primeros correspondían al lugar de la excavación y los siguientes 4 al número de catálogo.

A eso de las 13 hrs pasé a la biblioteca del museo y es impresionante la cantidad de material. Mi amigo logró que uno de los encargados me dejara entrar y como ya escribí antes su material bibliográfico es muy rico, poseen materiales sobre la religión, forma de vida, arquitectura, entre otros temas; de las culturas prehispánicas de México  y centroamérica.  Fue un día que no olvidaré.

domingo, 17 de abril de 2011

Una lluvia rara

El día de hoy estuve apoyando en el zoológico de Chapultepec, y agradecí que no fuese cierto el dicho popular de " si las vacas volaran". Llegué al zoológico como a las 10:30, me indicaron que no estaría apoyando en el área educativa, sino el hospital. Este domingo al veterinario le tocaba atender a Bantú, el gorila macho,  yo apoyé al médico,  haciendo observaciones del comportamiento de Bantú, desde las 10:30 hasta las 13:00 hrs; sin embargo a la hora de la comida, cambio algo.

A eso de las 14:00 hrs, era tiempo de darle el enriquecimiento a Bantú, cortamos fruta (plátano, manzana, mango, melón etc.), el médico y el guarda animales se introdujeron en el albergue para poner la comida, pero Bantú estaba un poco estresado, de repente empezó a correr por todo el albergue, el médico se aproximó rápido hacía puerta de salida, en eso Bantú retrocedió y literalmente se puso a defecar; en eso el guarda animales y el veterinario salieron del albergue al cuarto alterno, yo los esperaba ahí, ya que no tengo permitido entrar a los albergues de especies grandes como el gorila; dimos la vuelta y de repente una masa pestilente cayó en la cabeza del veterinario, eran las heces de bantú, el mañoso gorila cogió su excremento y lo lanzo hacía el cuarto donde estábamos nosotros, el guarda animales y yo nos moríamos de la risa, el veterinario maldecía al osado gorila. jajajaja...esta entrada fue un tanto escatológica.

viernes, 15 de abril de 2011

Una semana

Ya va siendo una semana de aquel evento,
han pasado siete días, en los que sabía no llamarías,
ya no esperaba tu llamada, aquel día que contesté,
esa voz me indicó, lo que pasaría, y que yo, te perdería,
como perderte; si nunca te tuve.

Cómo tener certeza de tí, si nunca concretamos nada.
Yo en un universo paralelo, añoraba tu reconocimiento.
En mi pasado ya habías estado, pero aquel frío diciembre
dicidí decirte adios, cortar los lazos de comunicación entre tú y yo.

Yo vivía con tranquilidad, sin pensar en ti, pero aquel febrero volviste.
Me pediste salir, yo te creí por creerte cambiado, sin embargo, tremenda sorpresa me lleve, cuando
salimos, y en tí no había cambio.
Te dejo atrás, sólo pidiendo que la vida, te ponga en el lugar que corresponda.

domingo, 10 de abril de 2011

Puntos en materia de Seguridad aplicados por Japón

En esta ocasión deseo escribir sobre Japón y  la seguridad , como tema de su política exterior. 
Para el periodo de reconstrucción de Japón, luego de la Segunda Guerra Mundial se impulsó la formulación de una nueva constitución  que entró en vigor el 3 de mayo de 1947. Uno de los artículos que caracteriza esta carta magna es el artículo 9º, que establece la renuncia total por parte del pueblo nipón al uso de la fuerza y asu vez a tener un ejército. Pero al interior del país habían intensos debates sobre que tan conveniente sería para Japón y su recuperación económica tener como aliado a EE.UU., que mantenía en ese momento una postura realista bélica debido a la división del Sistema Internacional en dos polos; asistir a EE.UU. en operaciones militares significaba contradecir el pacifismo decretado por la Constitución  de 1947.
   En 1951 Japón apostó por convertirse en Aliado de EE.UU. y firmó con este un Tratado de Seguridad, que garantiza la ayuda estadounidense a Japón frente a cualquier ataque externo; por tanto Japón se concentraría en su recuperación económica. El Tratado de seguridad   de ese instante se convirtió en la piedra angular de la política exterior japonesa. Para dar un mayor sustento al tratado,  Shigeru Yoshida primer ministro japonés de 1948 a 1954, elaboró la doctrina Yoshida, según la cual es positivo para el Estado japonés tener una política exterior cuya seguridad quede en manos de EE.UU.. De esta forma Yoshida limitó el radio de seguridad japonés a los países que lo rodeaban geográficamente por ejemplo Filipinas o Corea del Sur. Como parte de la nueva política adoptada por Japón en 1950 se estableció una Reserva de Policía Nacional. Luego las Fuerzas de Seguridad Nacional en 1952 que finalmente se convirtieron en las Fuerzas de Autodefensa que siguen vigentes hoy en día.
   Posteriormente se realizó una revisión al Tratado de Seguridad en 1960 por el primer ministro  Nobusuke Kishi, y se incluyó en el artículo 6º del tratado, que para edificar la seguridad  de Japón y la de EE.UU.; Japón permitiría establecer bases militares norteamericanas en su territorio, especialmente en Okinawa, a cambio de seguir recibiendo la protección militar estadounidense, lo anterior creó en la población oposición e inconformidad ante la medida. Nueve años  después  tras  el fracaso de de la guerra de Vietnam, el presidente Richard Nixon elaboró la doctrina Guam (1969 ) en la que EE.UU. emplazaba a sus aliados asiáticos a tomar mayores responsabilidades en su propia seguridad regional.
   La doctrina Guam sirvió como incentivo al gobierno japonés para que en 1976 se hiciera el Programa Nacional de Defensa (PND), en le documento se asentaron las bases para que Japón empezase a desarrollar una doctrina militar de defensa contra ataques exteriores con la coordinación de EE.UU. en todo momento. Esto dejo de manifiesto que Japón mantendrá unas fuerzas de defensa, para poder repeler por sí mismo una agresión directa militar, es decir sin armamento. En 1978 hubo una revisión al PND, se acordó estrechar aun más la cooperación con EE.UU. en lo referente a tópicos de seguridad y se añadió una cláusula, por medio de ella si existía una situación que afecte la seguridad alrededor del territorio japonés, denominado shugen ; Japón deberá de coordinarse con EE.UU. para actuar conjuntamente. Ha habido otras 2 revisiones al PND, pero se explicarán en la aplicación.
   Por  último cabe mencionar  que Corea del Norte firmó el Tratado de No Proliferación Nuclear en 1985. El Tratado de No Proliferación Nuclear fue creado en 1968, ha sido firmado por más de 170 Estados,  es un pacto por el que los Estados sin armas nucleares y los que las poseen se comprometen a renunciar a la investigación relativa a este armamento, al desarrollo y adquisición de estas armas. En 1995  fue objeto de una gran conferencia internacional para tratar sobre su expiración oficial, pero el Consejo de Seguridad de la ONU aseguró la continuidad indefinida de la vigencia del TNP. Se permitían además  acciones de represalias consensuadas contra cualquier culpable de ataque nuclear o de amenazas contra un país firmante del TNP.

domingo, 3 de abril de 2011

Britany

Jueves, diez treinta, Britany llegó al trabajo, lo sucedido durante la semana representaba una pesada carga para ella. La mujer de 25 años era una abogada recién egresada de la Facultad de Estudios en Ciencias sociales y leyes de Minnesota. Ella se especializó en criminología y técnicas forenses, por medio de ese diplomado obtuvo su título de abogada.

Britany trabajaba en la oficina núm. 8 de Minnesota, la cual se hacía cargo de llevar los casos relativos a asesinatos y suicidios. El empleo correspondió a Britany gracias al contacto que tuvo por parte de su madre, la señora de nombres Phoebe de 56 años,  ella se casó por segunda ocasión con Scott Rodríguez, un hombre de 60 años de origen latino. Scott era fiscal en Minnesota y por su  recomendación, Britany entró  directamente a trabajar dentro de la policía.

El lunes, los problemas de Britany se complicaron. Por una parte habían llegado 4 casos sobre suicidios de jóvenes entre 13 y 17 años, estudiantes de bachillerato, el móvil de los hechos giraba en torno a cierto video de una secta japonesa que conminaba a los jóvenes a quitarse la vida y encontrar al maestro Yukiko Nabusae, quien supuestamente alcanzó la iluminación eterna.

Britany venía saliendo con un hombre llamado Néstor Fernández, un administrador de 27 años que trabajaba para la multinacional Apple, a pesar de su edad, Néstor era exitoso en los negocios. Él se hacía cargo de colocar las acciones de Apple en fondos de inversión y otros sectores dentro del sistema financiero, el joven tenía visión, ya que hasta el momento, todos sus movimientos habían resultado positivos para  Apple. Néstor era hijo de migrantes mexicanos que se asentaron en Minnesota. Las pasiones de Néstor era dos, la primera, los caballos y sus carreras; la segunda, el esgrima, durante su adolescencia había sido campeón nacional de esgrima, lo que le valió para representar a Estados Unidos en una competencia internacional....CONTINUARÁ.

viernes, 1 de abril de 2011

Cinco para la nueve

Son cinco para las nueve, hora en la que está programada mi ejecución o salvación. En cualquier momento los cuatro verdugos harán su aparición, tengo miedo, pero al mismo tiempo se que debo ser valiente. A mi lado está mi confesora, quien me ha acompañado a lo largo del proceso; en ella encontré una amiga, confidente, terapeuta, maestra; en fin alguien que vivió, sufrió y rió conmigo durante esta etapa.
Por mis manos transpiro sudor frío, de repente una palmada de aliento toca mi hombro,  es mi confesora.  Ella trata de trasmitirme calma diciendo”tú la conoces, sabes su estructura, tú la hiciste, es producto de tú trabajo físico y mental”. Aquellas palabras ahuyentan el nerviosismo que había invadido mi ser.  “Inhala, exhala”, me dice mi subconsciente, un suspiro emana dentro de mí; todo está en paz por ahora.
Aún recuerdo la primera vez que pensé en ti, eras tan lejana, ajena a mí, sin embargo llegó el tiempo en que debíamos encontrarnos y enfrentarnos la una con la otra. En ese instante no imaginaba cómo serías, que temática tendrías, pero de algo estaba segura, yo debía comenzar a ocuparme de ti, antes de que tú lo hicieras  de mí.
Al encontrar el tópico sobre el cual versarías, busqué entre mis conocidos y la gente en derredor, a alguien que quisiese ayudarme y orientar a darte forma, cuerpo y contenido, yo conocí a muchas personas; pero estaban inmersas en su propia entropía. Hasta que encontré en un sendero, a mi confesora. Ella me hizo ver que era necesario te delimitara en un espacio y tiempo, para facilitar tu nacimiento.
Después de muchos desvelos y noches de insomnio logré darte un espacio y tiempo. Ahora el siguiente paso sería plantearme ¿cuál era tú problema?, preguntas como “¿Qué representas? o ¿qué significas? dentro del contexto llamado realidad, debía precisar que sabía sobre tu historia.
Une vez que supe con exactitud que curiosidad deseaba satisfacer respecto a ti, me concentré en fijarme objetivos generales y particulares que encausaran mis dudas. Estudiar, analizar, revisar, conocer, establecer, jerarquizar; entre otros verbos, eran el principio pero no el final de mis deseos y al mismo tiempo de tu naturaleza.
Tres para las nueve, falta poco. Durante la búsqueda de información acerca de ti, todo partía en torno a la hipótesis que formulé con respecto a tu esencia, afirmar o negar una proposición sobre tu ser; que fácil se puede escribir algo así; pero que equivocada estaba yo, pues en aquellos días me di cuenta  que eras compleja. La hipótesis que elaboré sobre el problema que representas, en vez de arrojarme  una afirmación,  me dio una negación. 
Ya han llegado algunos de los invitados a este singular juicio. Por un lado aquellos con los que existe un lazo de sangre, no quería que asistieran, el juicio quería librarlo yo sola, pero se enteraron que te había concluido e insistieron en venir a conocerte y ver si me salvas o me condenas.  A mi izquierda, muy cerca de mi confesora se encuentran las personas que yo escogí para llamar amigos, son pocos realmente; pero es significativo que estén conmigo en este momento.
Dos para las nueve. Mientras te escribía hubo una noción que nunca pasé por alto, algo era cierto, debía justificar porque te había escogido. ¿Por qué seguía insistiendo contigo, si me habías dado un no por respuesta?,  o  ¿para qué estudiarte?, ¿cuál era tu valor?,  si eres caprichosa con los aspirantes a profesionista, como lo soy yo.  Pero hasta ese momento comprendí, que más allá de tus caprichos, nosotros en conjunto aportaríamos algo a los demás.
Nuestra carta de presentación debía de contener un índice, que demostrará tu orden, y de mi parte una estructura de pensamiento. Nadie debe saber, ni siquiera mi confesora cuantas veces me hiciste perder la cabeza. En algunos momentos te abandonaba, por el bien de las dos, aunque tú sabías muy bien que yo regresaría; y así lo hacía, de eso te valías para que cada vez yo escribiera algo nuevo y mejorado sobre el problema que me causabas. Para poder conocerte y establecer tan tormentosa pero apasionante relación, tuve que recorrer muchos lugares, y buscar un pasado, verte en el presente para elegir tu futuro, estas en mis manos. 
Las nueve.  Ya vienen, se aproximan.  Los cuatro verdugos están en el marco de la puerta, de repente todo parece nublarse, sólo estamos ellos y yo, me caigo, ¿qué es esto? “no pasa nada” dice mi confesora; es tuya, defiéndela; no te dejaré, se que tu tampoco lo harás, eres mía, me salvarás.  


Son cinco para las nueve, hora en la que está programada mi ejecución o salvación. En cualquier momento los cuatro verdugos harán su aparición, tengo miedo, pero al mismo tiempo se que debo ser valiente. A mi lado está mi confesora, quien me ha acompañado a lo largo del proceso; en ella encontré una amiga, confidente, terapeuta, maestra; en fin alguien que vivió, sufrió y rió conmigo durante esta etapa.
Por mis manos transpiro sudor frío, de repente una palmada de aliento toca mi hombro,  es mi confesora.  Ella trata de trasmitirme calma diciendo”tú la conoces, sabes su estructura, tú la hiciste, es producto de tú trabajo físico y mental”. Aquellas palabras ahuyentan el nerviosismo que había invadido mi ser.  “Inhala, exhala”, me dice mi subconsciente, un suspiro emana dentro de mí; todo está en paz por ahora.
Aún recuerdo la primera vez que pensé en ti, eras tan lejana, ajena a mí, sin embargo llegó el tiempo en que debíamos encontrarnos y enfrentarnos la una con la otra. En ese instante no imaginaba cómo serías, que temática tendrías, pero de algo estaba segura, yo debía comenzar a ocuparme de ti, antes de que tú lo hicieras  de mí.
Al encontrar el tópico sobre el cual versarías, busqué entre mis conocidos y la gente en derredor, a alguien que quisiese ayudarme y orientar a darte forma, cuerpo y contenido, yo conocí a muchas personas; pero estaban inmersas en su propia entropía. Hasta que encontré en un sendero, a mi confesora. Ella me hizo ver que era necesario te delimitara en un espacio y tiempo, para facilitar tu nacimiento.
Después de muchos desvelos y noches de insomnio logré darte un espacio y tiempo. Ahora el siguiente paso sería plantearme ¿cuál era tú problema?, preguntas como “¿Qué representas? o ¿qué significas? dentro del contexto llamado realidad, debía precisar que sabía sobre tu historia.
Une vez que supe con exactitud que curiosidad deseaba satisfacer respecto a ti, me concentré en fijarme objetivos generales y particulares que encausaran mis dudas. Estudiar, analizar, revisar, conocer, establecer, jerarquizar; entre otros verbos, eran el principio pero no el final de mis deseos y al mismo tiempo de tu naturaleza.
Tres para las nueve, falta poco. Durante la búsqueda de información acerca de ti, todo partía en torno a la hipótesis que formulé con respecto a tu esencia, afirmar o negar una proposición sobre tu ser; que fácil se puede escribir algo así; pero que equivocada estaba yo, pues en aquellos días me di cuenta  que eras compleja. La hipótesis que elaboré sobre el problema que representas, en vez de arrojarme  una afirmación,  me dio una negación. 
Ya han llegado algunos de los invitados a este singular juicio. Por un lado aquellos con los que existe un lazo de sangre, no quería que asistieran, el juicio quería librarlo yo sola, pero se enteraron que te había concluido e insistieron en venir a conocerte y ver si me salvas o me condenas.  A mi izquierda, muy cerca de mi confesora se encuentran las personas que yo escogí para llamar amigos, son pocos realmente; pero es significativo que estén conmigo en este momento.
Dos para las nueve. Mientras te escribía hubo una noción que nunca pasé por alto, algo era cierto, debía justificar porque te había escogido. ¿Por qué seguía insistiendo contigo, si me habías dado un no por respuesta?,  o  ¿para qué estudiarte?, ¿cuál era tu valor?,  si eres caprichosa con los aspirantes a profesionista, como lo soy yo.  Pero hasta ese momento comprendí, que más allá de tus caprichos, nosotros en conjunto aportaríamos algo a los demás.
Nuestra carta de presentación debía de contener un índice, que demostrará tu orden, y de mi parte una estructura de pensamiento. Nadie debe saber, ni siquiera mi confesora cuantas veces me hiciste perder la cabeza. En algunos momentos te abandonaba, por el bien de las dos, aunque tú sabías muy bien que yo regresaría; y así lo hacía, de eso te valías para que cada vez yo escribiera algo nuevo y mejorado sobre el problema que me causabas. Para poder conocerte y establecer tan tormentosa pero apasionante relación, tuve que recorrer muchos lugares, y buscar un pasado, verte en el presente para elegir tu futuro, estas en mis manos. 
Las nueve.  Ya vienen, se aproximan.  Los cuatro verdugos están en el marco de la puerta, de repente todo parece nublarse, sólo estamos ellos y yo, me caigo, ¿qué es esto? “no pasa nada” dice mi confesora; es tuya, defiéndela; no te dejaré, se que tu tampoco lo harás, eres mía, me salvarás.